jueves, 27 de enero de 2011

Rosales que pinchan con amor

Llevo dos semanas y media en tierra de inmigrantes y pioneros. Cada día tatúa en mi piel nuevas experiencias, algunas veces marcadas con el dolor; aunque es ese tipo de sufrimiento que va cogido de la mano de la satisfacción, pues cada tropiezo que voy pegando es un grano de arena más al aprendizaje. No paro de sorprenderme a mí mismo por la voluntad que empeño en conseguir mi objetivo principal, encontrar un empleo en el que sea valorado.

Hoy el destino me ha ofrecido en bandeja una nueva oportunidad, una entrevista de trabajo. Aunque al principio me asustaba el hecho de que fuera telefónica, pues mi nivel de inglés en ocasiones parece haber nacido en los suburbios; eso junto a la falta de personalidad de este modelo de citas me inquieta. Aunque de todo se puede sacar provecho, por lo que el no estar delante de unas personas me ha facilitado prepararme un guión previniendo sus preguntas y así ganar confianza en cada contestación. El sabor que se me ha quedado en la boca ha sido bastante dulce, aunque ya he aprendido que detrás de una buena sensación vienen posibles decepciones. No debo idealizar emociones y seguir como si hoy no hubiese sucedido nada extraordinario.

El trabajo tiene lugar en Florida. Así que en la posibilidad de ser elegido tendría que mudarme allí. No es un problema, al fin y al cabo aún ni siquiera sé dónde voy a echar raíces algún día. El ambiente laboral que me han descrito viene envuelto en un clima de creatividad y exigencia que me excita. Ya les he dicho que me encantan los retos y veo esta oportunidad de trabajo como un desafío delicioso. Cada vez tengo más claro que ante situaciones extremas es cuando mostramos nuestro verdadero espíritu de lucha, y así conseguimos evolucionar.

No quiero levantarme un día y que la decepción por no ser elegido me derrumbe. Así que ya me he preparado una lista de tres productoras en el área de Hollywood a las que me acercaré mañana. Hay que olvidarse del pasado y si me fuerzas hasta del presente, porque esperar puede convertirte en un tiburón muerto.

Google es increíble. Cada vez que trato de guiarme en sus aplicaciones me sorprenden más y más. El primer día que cogí el autobús me metí en la página del servicio público de Los Angeles. Por su puesto me volví loco ante la presencia de mil líneas de colores que se cruzaban entre sí y solo servían para alimentar mi confusión. Pues esta maravillosa página te permite escribir dos direcciones y guiarte por la ciudad, mostrándote los autobuses y trenes que hay que coger con sus transbordos inclusos. Así que mañana me expondré de nuevo a los autobuses y trenes que tanto asustan con sus líneas de colores. Al final no es para tanto, además el autobús recoge a los personajes más excéntricos de Los Angeles. El otro día, cuando me perdí, se sentó a mi lado una chica que iba bastante drogada. Su comportamiento surfeaba entre la risa, el enfado y una angustia que casi la invitaba al llanto. Gritaba y se metía con todos los que encontraba en su camino, yo estaba sentado justo al lado de ella pero por lo visto no era objeto de su locura. Me encantaba su voz, me recordaba a esas grandes cantantes de soul cuyo tono de voz te estremece.

El martes estuve en el Océano. No sabía si reír, llorar... ¿Cómo se supone que se comporta uno cuando ve cumplir sus sueños? En serio, verme rodeado de esas playas infinitas; músicos ambulantes; patinadores y tanta gente libre alrededor. Me tuve que sentar en un banco al final del muelle durante un momento para intentar entender qué caminos me han traído a vivir esta aventura, con el Océano desplegándose tranquilo y dócil delante de mis ojos. He soñado millones de veces con esta experiencia y, cuando estaba viviéndola, me daba miedo no llegar a entender todo su significado. De hecho creo que hasta que no cumpla muchos años más y todo esto sea un recuerdo, no conseguiré comprenderlo. No podéis imaginar las risotadas que me pego cuando de repente descubro que estoy en traje paseando por Hollywood, con un maletín que contiene papeles con direcciones; una cámara de fotos; un libro; y, obviamente, tres o cuatro sobres donde guardo los currículum. La atmósfera surrealista que envuelve todo esto puede conmigo. Porque además voy siempre solo. No tengo amigos ni nadie con quien reírme y compartir esos momentos, ¿y a quién le importa?

Lo que más me asusta es que en Abril todo se acaba y odiaría volverme a Murcia con la decepción de no encontrar respuesta a mis inquietudes. Aún me quedan muchos días para pensar en ello, aunque supongo que será normal pensar en esto de vez en cuando. Al fin y al cabo el ser humano es miedoso por naturaleza, pero para eso está la fuerza de cada uno de saltar con los ojos cerrados a lo desconocido. Una frase que me encanta de Jack London y que intento tener presente cada día, "vive como si no existieras".

4 comentarios:

  1. Jooooo Juan Antonio!!!! todos los dias espero con impaciencia asomarme a este diario maravilloso, y cada dia me sorprendes siempre se me saltan las lágrimas y me enorgullece tenerte como hijo, creo que papá y yo hemos hecho una buena labor, eres noble, cariñoso, íntegro y no es porque seas mi hijo,pero me gusta como enfocas la vida, vas a conseguir todo lo que te propones porque te lo mereces y te lo estás currando, eres joven todavía y sé que tus sueños se van a realizar porque te vas a empeñar en ello, y aunque tengas que volver solo es temporal para arreglar papeles, pero vas a volver ya lo verás, y sacarás todo lo que llevas dentro. Un besicoooo muy grande cariño, y sigue adelante ya sabes que nuestro apoyo lo tienes siempre.

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  2. En realidad tengo un mono atado a la pata de la cama que con una mano escribe y con otra abanica! gracias maaaaa!! si saliese lo de la entrevista de ayer sería increíble. Aunque claro, je je pensar que va a salir es construir castillos en el aire. Tú dices de hijo y yo de padres, que si no es por vuestra confianza no llego ni a Caravaca.

    Hoy no sé si podremos hablar por Skype, en seguida me voy a bajar a la ciudad y suelo volver tarde. Hoy que voy cerquilla son dos horas y media en autobús, cuando vuelva a Murcia y coja el bus me voy a confiar y voy a terminar en Almería, ya verás!

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  3. Dices en tu blog: "No tengo amigos ni nadie con quien reírme y compartir esos momentos, ¿y a quién le importa?" Y es la primera vez que tengo que decirte que te equivocas, porque tiene muchos amigos, tienes a tus padres y hermana, a tus familiares, que te siguen todos los días, que comparten contigo tus sueños y desvelos, porque son los nuestros, que te admiran porque has sido capaz de ir a buscar tus sueños, aún a riesgo de no encontrarlos, pero no porque tú no quieras ir a su encuentro, si no porque a veces hacen falta otros hilos que los propios para atraparlos. Y otra cosa, cuando vengas en abril, llevarás a tu espalda un bagaje que no lo dan los libros ni las universidades, porque no hay mejor escuela que la propia vida, y en tu mochila llevarás un sobresaliente en asignaturas que algunos (yo) todavía tenemos pendientes, y que gracias a que otros (tú) allanaron el camino antes, al fin podremos aprobar. Llegará el día en el que tus sueños se harán realidad. También llegará el día en el que una vez logrados, mires hacía atrás, y te alegrarás de haber caminado en la vida libre de triunfos, medallas y alabanzas, porque también los sueños atan, es la paradoja del ser humano, que cuanto más cerca estamos de alcanzarlos, más nos alejamos de nuestra esencia, y hace falta que otro ser humano o algún suceso trascendente nos rescate y nos transporte a un tiempo pasado, perdido y protegido en lo más recóndito de nuestro ser.
    Ahora no somos conscientes del viaje que juntos vamos a realizar. Quizás sea la primera y última vez que nuestros caminos se encuentren actuando los dos en estado puro. Ese será uno de nuestros mayores triunfos.
    Y para terminar, no te pese si no encuentras respuestas a tus inquietudes, eso significa que estás vivo, porque el que ya ha encontrado todas las respuestas, o esta muerto, o vive como si lo estuviera. Besos

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  4. Gracias papá, una vez más tienes razón. Menos mal que tu ya has recorrido todo el camino por el que yo voy; no hablo físico sino el lado más místico, o como quieras llamarlo. El viaje que vamos a hacer juntos en un mes sin duda va a ser uno de los puntos fuertes de nuestra vida, recorrer los parques naturales de California, Arizona, Nevada y Utah. Acabo de escribirlo y aún no me creo que vayamos a vivir todo eso. Va a ser una experiencia increíble. ¿te imaginas ya entre bosques de Sequoias o entre desfiladeros en Colorado? Y si no ya verás las playas.

    Tienes razón que aquí estoy aprendiendo mucho de espíritu. Pero bueno, ya sabes como somos los jóvenes. Nos guiamos por el corazón hacia una meta que es la niebla de ese romanticismo soñado, es como el amor imposible. Y no llegar a conseguirlo lleva a frustración, lo cual también es una de las consecuencias del romanticismo. Pero tranquilo que a mí en cuanto no me gusta una conversación la cambio, no me voy a apenar más de lo necesario pues no estamos aquí para sufrir sino para disfrutar.

    Besos poeta!

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